EL ARCHIPIELAGO CARCELARIO ES EL MAXIMIZADOR DE LAS TECNICAS DEL PROCEDIMIENTO PUNITIVO PENITENCIARIO.
LA BASE DEL SISTEMA ES EL PANOPTICO QUE TRATA DE LA CONTINUA VIGILANCIA DE TODA LA SOCIEDAD, BAJO LOS OJOS OMNIPRESENTES Y OMNISCIENTES DE LA SOCIEDAD MISMA, A PARTIR DE LOS AGENTES SOCIALIZADORES COMO LA FAMILIA, LA ESCUELA Y EL RESTO DE LAS INSTITUCIONES DISCIPLINARIAS.
EL MODELO PENITENCIARIO REPRESENTADO POR EL ESTADO TODO, SANCIONA Y EJECUTA A PARTIR DE FORMAS MULTIPLES, DIFUSAS Y COMPACTAS LAS BASES QUE ESTABLECEN LA CONDUCTA SOCIAL POR MEDIO DEL CASTIGO.
CARACTERIZANDO A LA SOCIEDAD POR LA FORMA QUE ABSORBE EL SENTIR LEGITIMADOR DEL PODER DE CASTIGAR.
6° de Economía 2013
lunes, 23 de diciembre de 2013
sábado, 26 de octubre de 2013
NIETZSCHE
CRITICA A LA IDEA DE UN "MUNDO VERDADERO"
LA VIDA PARA NIETZSCHE SE VINCULA A LA MULTIPLICIDAD, EL ESPÍRITU DIONISÍACO Y LO INSTINTIVO. VA A IR EN CONTRA DE LA VERDAD ESTÁTICA.
SE VINCULA A LO PASIONAL, A LA FURIA QUE TIENE EL SER HUMANO, AL SALVAJISMO; EL HOMBRE SERÁ UN ANIMAL MUTANTE.MIENTRAS QUE PARA ARISTOTELES ES RACIONAL, PARA NIETZSCHE SERÁ PASIONAL Y CREATIVO.
LA VERDAD CRISTIANA NO ES SUPERIOR PORQUE NIEGA LA CARACTERÍSTICAS HUMANAS, NIEGA LA VIDA. DE AQUÍ LA EXPRESIÓN "DIOS HA MUERTO", SI LA VERDAD CRISTIANA NIEGA LA VIDA, HAY QUE SUPRIMIRLA.
ESTA SUPRESIÓN GENERA UN ESTADO ANOMICO POR LA AUSENCIA DE NORMAS, EL NIHILISMO.
NIETZSCHE PROPONE NUEVAS TABLAS, NUEVOS VALORES, UNA VEZ SUPRIMIDA LA REALIDAD CRISTIANA OTRO MUNDO APARECERÁ.
DESARROLLO DE LA TRANSVALORACIÓN DE LOS ESCLAVOS EN EL PAPEL DEL RESENTIMIENTO.
NIETZSCHE DISTINGUE DOS CLASES: LA DE LOS SEÑORES Y LA DE LOS ESCLAVOS.
LA CLASE DE LOS SEÑORES A SU VES ESTA COMPUESTA POR DOS CASTAS: LA GUERRERA Y LA SACERDOTAL.
ASÍ, LA SEGUNDA DERIVA DE LA PRIMERA Y SE CONVIERTE EN SU ANTÍTESIS.
LA CASTA DE LOS GUERREROS PRACTICA LAS VIRTUDES DEL CUERPO; LA CASTA SACERDOTAL SE DEFINE POR LA IMPOTENCIA E INVENTA EL ESPIRITU.
AMBAS CASTAS SON RIVALES. DE ESA RIVALIDAD SE DA EL SALTO DE UNA MORAL DE SEÑORES A UNA MORAL DE ESCLAVOS, YA QUE LO SACERDOTES MOVILIZAN A LOS ESCLAVOS DÉBILES Y ENFERMOS CONTRA LA CLASE DOMINANTE DE LOS GUERREROS.
ESTA MOVILIZACIÓN ES POSIBLE INVIRTIENDO LOS VALORES ARISTOCRÁTICOS, CREANDO UNA MORAL DE ESCLAVOS QUE COMIENZA CON EL PUEBLO JUDÍO, HEREDADA Y ASUMIDA POR EL CRISTIANISMO.
SOLO ALLÍ EL SACERDOTE TRIUNFA SOBRE EL GUERRERO.
EL "SUPERHOMBRE"
NIETZSCHE VE AL SUPERHOMBRE COMO EL HOMBRE NUEVO QUE APARECE TRAS LA MUERTE DE DIOS. LO CONCIBE COMO EL INDIVIDUO FIEL A LOS VALORES DE LA VIDA, AL SENTIDO DE LA TIERRA.
FUE CONTRARIO AL IGUALITARISMO, PARA NIETZSCHE HAY HOMBRE INFERIORES Y HOMBRES SUPERIORES; EL SUPERHOMBRE PERTENECE AL SEGUNDO GRUPO.
A PARTIR DE LA "MORAL DE LA VIOLENCIA", ATRIBUYE LA FALTA DE COMPASIÓN, LA CRUELDAD, LA FUERZA, EL GUSTO POR LA ACCIÓN, EL DESPRECIO POR LOS DÉBILES, EL COMBATE Y LA GUERRA.
EL HOMBRE AL QUE HAY QUE SUPERAR ES EL QUE SE SOMETE A LOS VALORES TRADICIONALES, A LA "MORAL DEL REBAÑO".
KANT - "PRINCIPIO DE UNIVERSALIDAD"
LO QUE PERSIGUE KANT, ES FUNDAMENTAR UNA ÉTICA RACIONAL UNIVERSAL, BASADA EN LEYES QUE DETERMINAN LA VOLUNTAD Y QUE NO PUEDEN ESTAR SUSTENTADA EN LA PLURALIDAD DE FINES, PUESTO QUE ESTOS VARÍAN.
SI PUEDE HABER UNA ÉTICA RACIONAL, ESTÁ DESCANSARÁ SOBRE PRINCIPIOS UNIVERSALES Y NO SOBRE RELATIVISMOS CULTURALES O HISTÓRICOS.
"OBRA DE MANERA QUE LA MÁXIMA DE TU VOLUNTAD PUEDA SERVIR SIEMPRE COMO PRINCIPIO DE UNA LEGISLACIÓN UNIVERSAL"
SI PUEDE HABER UNA ÉTICA RACIONAL, ESTÁ DESCANSARÁ SOBRE PRINCIPIOS UNIVERSALES Y NO SOBRE RELATIVISMOS CULTURALES O HISTÓRICOS.
"OBRA DE MANERA QUE LA MÁXIMA DE TU VOLUNTAD PUEDA SERVIR SIEMPRE COMO PRINCIPIO DE UNA LEGISLACIÓN UNIVERSAL"
ANÁLISIS DE "WALKING AROUND"
INTRODUCCIÓN
El poema, se ubica en su obra Residencia en la tierra. Este texto aparece en la Segunda Residencia (1927‐1935). El sentimiento de solidaridad triunfará en el mundo sobre el individualismo – sensibilidad tocada por la experiencia de la Guerra Civil española (1936‐1939) en la que el fuerte pesimismo predominante del poeta será la nota dominante y Walking around será uno de sus ejemplos más potentes.
Residencia en la tierra fue escrita por Neruda en un momento muy particular de su historia.
Para contextualizarla podemos establecer una división de su obra en cuatro épocas y ubicar
esta obra en la segunda de ellas, cuando sale de Chile en 1927 hacia Oriente como embajador en Java, lo que pone ante sus ojos todo un nuevo mundo. Este “descubrimiento” impactará en su sensibilidad en la que la materialidad de las cosas, las presentes y también las ausentes, inundará su poesía. Neruda no reside, es ajeno al mundo: la obra –su título es por demás significativo– es una forma de canalizar tal vez su necesidad de pertenecer a un lugar.
En cuanto a su evolución estilística, Neruda buscó distintos estilos para comunicarse con el
lector. Al realizar una clasificación de los mismos identificamos cuatro facetas:
Neruda llega al denominado período de “expresión indirecta” luego de una etapa de búsqueda de un estilo propio que lo despegue totalmente de sus primeras épocas, expresando cierto rechazo hacia posiciones estilísticas modernistas como las de Rubén Darío.
El primer fruto de este período es precisamente Residencia en la tierra, cuyo proceso de
elaboración llevó muchos años.
Los cambios son notorios: el poema de amor corto y de expresión directa se transforma en un extenso poema unitario, con cierta unidad de inspiración y muchas veces expresión indirecta. Utilizará recursos incomunicables a menudo para el lector, como los sueños, o la metáfora surrealista, descomponiendo la realidad desde una visión íntima y extremadamente subjetiva e irracional.
Este proceso impactó en los lectores del propio autor, por un lado a aquellos seguidores que se sintieron extraviados ante el cambio de estilo y el carácter expresivo de su primera poesía, y por otro lado los llamados “snobs” quienes creían que la poesía no debía partir de la condición de ser entendible o inteligible para el lector común y vieron en este estilo de Neruda, conocido como un período oscuro, una etapa fértil y positiva. Las técnicas de expresión indirecta reciben la influencia vanguardista que hacen que la distancia entre escritor y lector se vaya haciendo más grande, tanto así que corre riesgo la función comunicativa del arte.
DEL TEXTO
En otro orden, Walking around, poema que integra la Segunda Residencia, es un texto
compuesto por diez estrofas, cuyos versos son libres, por lo que Neruda no se ajusta a una
estructura formal predeterminada. Construye, pues, un poema flexible, a tono con las
tendencias artísticas del siglo XX, las que rechazaban radicalmente lo tradicional y las
estructuras regulares de las obras poéticas.
El título del poema, está íntimamente relacionado con la realidad del autor: al viajar
conocerá otros lugares que se abrirán frente a sus ojos, nuevos idiomas, nuevas culturas, lo
que le imprimirá un carácter cosmopolita. Por ello se explica el título Walking around, ese
viajar alrededor del mundo, de las cosas, ese andar vagabundo y sin descanso. Andar del
poeta‐yo lírico – el poema está tocado por un fuerte carácter autobiográfico– que sugiere una relación de ajenidad o extrañamiento con aquello que tiene delante de sí, extrañamiento que alcanza también al universo lingüístico evidenciado en el mismo título en inglés, que contrasta con el cuerpo del poema cuyo vehículo es el español: desencuentro de lenguas, de culturas, encrucijada del yo. Como en muchos títulos de Neruda, este es abierto, nos inclina a
hipótesis diversas acerca de los contenidos del texto en sí. Ese “caminando alrededor” como
sentido primero del título se liga a la situación del yo lírico de movimiento marginal, de tránsito permanente en torno al mundo, de imposibilidad de ocupar el centro o algún punto de centralidad. Acaba como una especie de espectador del mundo, el que se le ofrece como
mero espectáculo, y en su calidad de testigo nos transfiere una visión íntima de la realidad.
El yo lírico se encuentra, a lo largo del poema, rodeado de imágenes cotidianas y urbanas.
Apelará a este tipo de imágenes ya que de acuerdo a su especial sensibilidad a la naturaleza de las cosas busca en ellas conocer el mundo y mostrarlo, escapando de la abstracción. En el texto va a tener una gran importancia la materia; el poeta nos habla constantemente de lo urbano, lo artificial de la ciudad, nos pone frente a nuestros ojos un mundo que se desarma frente a nosotros, frente a nuestros pasos, a nuestra trascendencia como seres en la Tierra. El mundo para Neruda, no es un mundo nuevo, no es un mundo habitable: es un mundo catastrófico en el que suceden hechos como la Shoá, las guerras, etc. En el poema la ciudad es el espacio privilegiado aunque negativo; elemento antipoético acuñado ya por el vanguardismo –el futurismo en particular– y más allá, y originalmente, por Baudelaire, que puebla el texto: satrerías, cines…
El poema comienza con la frase "Sucede que me canso de ser hombre"; es un cansancio de tipo existencial. En esta estrofa encontramos un símbolo típico del modernismo llevado a la ruina: el cisne, bello e inofensivo, es cubierto por lo artificial, el fieltro. El ser de fieltro también le implica absorberlo oscuro del mundo.
La segunda estrofa refleja la desesperación que tiene el hombre cuando huele lo artificial; el solo olerlo le alcanza para repudiarlo. Hay un efecto de acumulación con la repetición de la
conjunción copulativa "ni", que sirve a la enumeración de aquellas cosas que rechaza o repudia; la repetición enfatiza ese sentimiento.
La tercera estrofa nos remite al comienzo, "Sucede que me canso…"; nos sugiere ese cansancio o agobio del inicio, se cansa incluso de todas las partes de su cuerpo, se cansa de sí mismo.
La cuarta estrofa es una de las más ricas en cuanto al contenido del poema. Comienza con un conector con el que se inicia un rescate de algo positivo: "Sin embargo…" Aparecerá una
comparación y una contradicción simultáneamente entre un notario y un lirio, lo que busca
explicar la materialidad del mundo. Neruda nos quiere mostrar que se puede asustar al
notario, que es un trabajo en el que se está rodeado constantemente de elementos artificiales – el papel, la tinta, el estar en un universo oficinesco– con una flor, símbolo de lo natural. Aparece aquí una expresión típica surrealista; aparece asociada la imagen de una monja y la de un golpe de oreja, asociación ilógica que nos recuerda la metáfora surrealista que invita a que la idea se comprenda al tomar la totalidad de la imagen con la que podemos entender que el matar a una monja se manifiesta en contra de la Iglesia y Dios. Este fue el creador de este mundo y lo que se pregunta Neruda aquí es cómo Dios pudo crear este mundo material, artificial, catastrófico. Si lo vinculamos con su terrenalismo sabemos que Neruda es ateo, por lo que nos puede sugerir que para él Dios es artificial también, una invención, como un “artefacto abstracto”; importa para él el aquí y ahora y no otra fuerza en el mundo.
Hay un paralelismo: sería bello, sería delicioso; mediante este sugiere aquellas cosas que son necesarias para terminar con tanta artificialidad. El ir con un cuchillo verde nos sugiere darle vida al mundo, expresa la necesidad de matar este mundo artificial con lo natural, esa cualidad surrealista del verdor asociado, en tanto elemento asociado a la naturaleza, con lo inorgánico y frío y rígido y artificial del cuchillo.
La séptima estrofa comienza con la expresión "el día lunes…, expresión ambigua al anticipar la posibilidad de inaugurar algo, de ruptura con lo mecánico, pero que al mismo tiempo anticipa lo rutinario de la vida, que es lo que acaba imponiéndose y multiplicando la asfixia y el agobio de un ser cuya superficialidad se potencia.
La octava estrofa dice: …los hospitales donde los huesos salen por la ventana. El recinto hospitalario desborda casi por “sus poros”, como hastiado, y es una sensación similar a la del yo lírico que se siente agobiado de tanta carga, de la acumulación.
La novena estrofa es otra de las más ricas y es totalmente surrealista; utiliza un polisíndeton
para hacer más pesado a través del efecto acumulativo, como antes lo hiciera con los
hospitales. "Yo paseo con calma… Neruda después de todo lo que expresa nos dice que pasea con calma, imagen de tranquilidad interior que va a culminar con furia y olvido. Hay dos posiciones frente al mundo: puede pasear con calma como si lo que lo rodea fuera ignorado por sus ojos, mientras que por otro lado nos da la sensación de que este mundo lo tocase hasta generarle furia, como si experimentara un doble movimiento de huida y retorno al mundo, de desencuentro y encuentro doloroso. Pero el yo lírico parece tocar el mundo pero no lo alcanza porque se coloca finalmente como espectador, ve al mundo pero no lo habita ya que no es un mundo habitable. Lo ve con furia y olvido porque aunque no habite en él no le agradan las cosas que ve en él, le producen furia, le repugna lo artificial, trata de olvidarlo y lo tranquiliza aparentemente ese no estar en el mundo.
Lo artificial, además, sirve como escenografía por la que transita: "Cruzo oficinas y tiendas de ortopedia". Esta ser artificial en un mundo de tiendas que construyen artefactos que remedan el cuerpo, lo sustituyen como prótesis. Incluso no nombra al humano sino a sus prendas, a su entorno, a aquello que oficia de ornamento, que lo inviste y lo deshumaniza; sugiere la idea de un hombre vacío.
La metáfora surrealista es una buena aliada del poeta que halla en su entorno la impronta de
lo irracional o absurdo. Es recurso poético pero también visión del mundo. Es asociación por la emoción antes que por la lógica de aquello que genera perplejidad y la imposibilidad de darle un sentido y alojarlo en nuestro mundo interior. Así: navegando en un agua de origen y ceniza, o hay pájaros de color de azufre, o tiritando de sueño, hacia abajo, en las tripas mojadas de la tierra, o el día lunes arde como el petróleo… Ejercicio de interpretación para el lector, de asociación, que no elude el contraste con lo concreto y aparentemente univalente de
imágenes como hay ropas colgadas de un alambre… que posee el efecto de lo concreto sin más, del paisaje con apenas rastros de humanidad, que se deshumaniza –todo acaba en la enumeración de elementos vulgares que parcializan al sujeto: calzoncillos, toallas y camisas que lloran lentas lágrimas sucias.
El poema va a culminar con la expresión "lentas lágrimas sucias". La imagen genera un
contrasentido: las lágrimas cumplen la función de limpiar, de purificar, pero no en este caso en el que son sucias, asociadas a la fatalidad de lo contaminado por formar parte de este mundo.
A lo largo del poema podemos apreciar cómo el poeta nos muestra la realidad desfigurada,
nos ilustra otra realidad y, de este modo, la percibimos desde otras perspectivas. En este
sentido, podemos considerar a Neruda un poeta que educa nuestra mirada permitiéndonos
redescubrir las cosas que en él habitan no solo pensándolas sino, especialmente, sintiéndolas.
El poema, se ubica en su obra Residencia en la tierra. Este texto aparece en la Segunda Residencia (1927‐1935). El sentimiento de solidaridad triunfará en el mundo sobre el individualismo – sensibilidad tocada por la experiencia de la Guerra Civil española (1936‐1939) en la que el fuerte pesimismo predominante del poeta será la nota dominante y Walking around será uno de sus ejemplos más potentes.
Residencia en la tierra fue escrita por Neruda en un momento muy particular de su historia.
Para contextualizarla podemos establecer una división de su obra en cuatro épocas y ubicar
esta obra en la segunda de ellas, cuando sale de Chile en 1927 hacia Oriente como embajador en Java, lo que pone ante sus ojos todo un nuevo mundo. Este “descubrimiento” impactará en su sensibilidad en la que la materialidad de las cosas, las presentes y también las ausentes, inundará su poesía. Neruda no reside, es ajeno al mundo: la obra –su título es por demás significativo– es una forma de canalizar tal vez su necesidad de pertenecer a un lugar.
En cuanto a su evolución estilística, Neruda buscó distintos estilos para comunicarse con el
lector. Al realizar una clasificación de los mismos identificamos cuatro facetas:
- la primera denominada “estilo directo”
- la segunda “estilo experimental”
- la tercera “estilo indirecto” al que corresponde esta obra.
- la cuarta y última “estilo directo” nuevamente (representa esta un retorno parcial a formas anteriores).
Neruda llega al denominado período de “expresión indirecta” luego de una etapa de búsqueda de un estilo propio que lo despegue totalmente de sus primeras épocas, expresando cierto rechazo hacia posiciones estilísticas modernistas como las de Rubén Darío.
El primer fruto de este período es precisamente Residencia en la tierra, cuyo proceso de
elaboración llevó muchos años.
Los cambios son notorios: el poema de amor corto y de expresión directa se transforma en un extenso poema unitario, con cierta unidad de inspiración y muchas veces expresión indirecta. Utilizará recursos incomunicables a menudo para el lector, como los sueños, o la metáfora surrealista, descomponiendo la realidad desde una visión íntima y extremadamente subjetiva e irracional.
Este proceso impactó en los lectores del propio autor, por un lado a aquellos seguidores que se sintieron extraviados ante el cambio de estilo y el carácter expresivo de su primera poesía, y por otro lado los llamados “snobs” quienes creían que la poesía no debía partir de la condición de ser entendible o inteligible para el lector común y vieron en este estilo de Neruda, conocido como un período oscuro, una etapa fértil y positiva. Las técnicas de expresión indirecta reciben la influencia vanguardista que hacen que la distancia entre escritor y lector se vaya haciendo más grande, tanto así que corre riesgo la función comunicativa del arte.
DEL TEXTO
En otro orden, Walking around, poema que integra la Segunda Residencia, es un texto
compuesto por diez estrofas, cuyos versos son libres, por lo que Neruda no se ajusta a una
estructura formal predeterminada. Construye, pues, un poema flexible, a tono con las
tendencias artísticas del siglo XX, las que rechazaban radicalmente lo tradicional y las
estructuras regulares de las obras poéticas.
El título del poema, está íntimamente relacionado con la realidad del autor: al viajar
conocerá otros lugares que se abrirán frente a sus ojos, nuevos idiomas, nuevas culturas, lo
que le imprimirá un carácter cosmopolita. Por ello se explica el título Walking around, ese
viajar alrededor del mundo, de las cosas, ese andar vagabundo y sin descanso. Andar del
poeta‐yo lírico – el poema está tocado por un fuerte carácter autobiográfico– que sugiere una relación de ajenidad o extrañamiento con aquello que tiene delante de sí, extrañamiento que alcanza también al universo lingüístico evidenciado en el mismo título en inglés, que contrasta con el cuerpo del poema cuyo vehículo es el español: desencuentro de lenguas, de culturas, encrucijada del yo. Como en muchos títulos de Neruda, este es abierto, nos inclina a
hipótesis diversas acerca de los contenidos del texto en sí. Ese “caminando alrededor” como
sentido primero del título se liga a la situación del yo lírico de movimiento marginal, de tránsito permanente en torno al mundo, de imposibilidad de ocupar el centro o algún punto de centralidad. Acaba como una especie de espectador del mundo, el que se le ofrece como
mero espectáculo, y en su calidad de testigo nos transfiere una visión íntima de la realidad.
El yo lírico se encuentra, a lo largo del poema, rodeado de imágenes cotidianas y urbanas.
Apelará a este tipo de imágenes ya que de acuerdo a su especial sensibilidad a la naturaleza de las cosas busca en ellas conocer el mundo y mostrarlo, escapando de la abstracción. En el texto va a tener una gran importancia la materia; el poeta nos habla constantemente de lo urbano, lo artificial de la ciudad, nos pone frente a nuestros ojos un mundo que se desarma frente a nosotros, frente a nuestros pasos, a nuestra trascendencia como seres en la Tierra. El mundo para Neruda, no es un mundo nuevo, no es un mundo habitable: es un mundo catastrófico en el que suceden hechos como la Shoá, las guerras, etc. En el poema la ciudad es el espacio privilegiado aunque negativo; elemento antipoético acuñado ya por el vanguardismo –el futurismo en particular– y más allá, y originalmente, por Baudelaire, que puebla el texto: satrerías, cines…
El poema comienza con la frase "Sucede que me canso de ser hombre"; es un cansancio de tipo existencial. En esta estrofa encontramos un símbolo típico del modernismo llevado a la ruina: el cisne, bello e inofensivo, es cubierto por lo artificial, el fieltro. El ser de fieltro también le implica absorberlo oscuro del mundo.
La segunda estrofa refleja la desesperación que tiene el hombre cuando huele lo artificial; el solo olerlo le alcanza para repudiarlo. Hay un efecto de acumulación con la repetición de la
conjunción copulativa "ni", que sirve a la enumeración de aquellas cosas que rechaza o repudia; la repetición enfatiza ese sentimiento.
La tercera estrofa nos remite al comienzo, "Sucede que me canso…"; nos sugiere ese cansancio o agobio del inicio, se cansa incluso de todas las partes de su cuerpo, se cansa de sí mismo.
La cuarta estrofa es una de las más ricas en cuanto al contenido del poema. Comienza con un conector con el que se inicia un rescate de algo positivo: "Sin embargo…" Aparecerá una
comparación y una contradicción simultáneamente entre un notario y un lirio, lo que busca
explicar la materialidad del mundo. Neruda nos quiere mostrar que se puede asustar al
notario, que es un trabajo en el que se está rodeado constantemente de elementos artificiales – el papel, la tinta, el estar en un universo oficinesco– con una flor, símbolo de lo natural. Aparece aquí una expresión típica surrealista; aparece asociada la imagen de una monja y la de un golpe de oreja, asociación ilógica que nos recuerda la metáfora surrealista que invita a que la idea se comprenda al tomar la totalidad de la imagen con la que podemos entender que el matar a una monja se manifiesta en contra de la Iglesia y Dios. Este fue el creador de este mundo y lo que se pregunta Neruda aquí es cómo Dios pudo crear este mundo material, artificial, catastrófico. Si lo vinculamos con su terrenalismo sabemos que Neruda es ateo, por lo que nos puede sugerir que para él Dios es artificial también, una invención, como un “artefacto abstracto”; importa para él el aquí y ahora y no otra fuerza en el mundo.
Hay un paralelismo: sería bello, sería delicioso; mediante este sugiere aquellas cosas que son necesarias para terminar con tanta artificialidad. El ir con un cuchillo verde nos sugiere darle vida al mundo, expresa la necesidad de matar este mundo artificial con lo natural, esa cualidad surrealista del verdor asociado, en tanto elemento asociado a la naturaleza, con lo inorgánico y frío y rígido y artificial del cuchillo.
La séptima estrofa comienza con la expresión "el día lunes…, expresión ambigua al anticipar la posibilidad de inaugurar algo, de ruptura con lo mecánico, pero que al mismo tiempo anticipa lo rutinario de la vida, que es lo que acaba imponiéndose y multiplicando la asfixia y el agobio de un ser cuya superficialidad se potencia.
La octava estrofa dice: …los hospitales donde los huesos salen por la ventana. El recinto hospitalario desborda casi por “sus poros”, como hastiado, y es una sensación similar a la del yo lírico que se siente agobiado de tanta carga, de la acumulación.
La novena estrofa es otra de las más ricas y es totalmente surrealista; utiliza un polisíndeton
para hacer más pesado a través del efecto acumulativo, como antes lo hiciera con los
hospitales. "Yo paseo con calma… Neruda después de todo lo que expresa nos dice que pasea con calma, imagen de tranquilidad interior que va a culminar con furia y olvido. Hay dos posiciones frente al mundo: puede pasear con calma como si lo que lo rodea fuera ignorado por sus ojos, mientras que por otro lado nos da la sensación de que este mundo lo tocase hasta generarle furia, como si experimentara un doble movimiento de huida y retorno al mundo, de desencuentro y encuentro doloroso. Pero el yo lírico parece tocar el mundo pero no lo alcanza porque se coloca finalmente como espectador, ve al mundo pero no lo habita ya que no es un mundo habitable. Lo ve con furia y olvido porque aunque no habite en él no le agradan las cosas que ve en él, le producen furia, le repugna lo artificial, trata de olvidarlo y lo tranquiliza aparentemente ese no estar en el mundo.
Lo artificial, además, sirve como escenografía por la que transita: "Cruzo oficinas y tiendas de ortopedia". Esta ser artificial en un mundo de tiendas que construyen artefactos que remedan el cuerpo, lo sustituyen como prótesis. Incluso no nombra al humano sino a sus prendas, a su entorno, a aquello que oficia de ornamento, que lo inviste y lo deshumaniza; sugiere la idea de un hombre vacío.
La metáfora surrealista es una buena aliada del poeta que halla en su entorno la impronta de
lo irracional o absurdo. Es recurso poético pero también visión del mundo. Es asociación por la emoción antes que por la lógica de aquello que genera perplejidad y la imposibilidad de darle un sentido y alojarlo en nuestro mundo interior. Así: navegando en un agua de origen y ceniza, o hay pájaros de color de azufre, o tiritando de sueño, hacia abajo, en las tripas mojadas de la tierra, o el día lunes arde como el petróleo… Ejercicio de interpretación para el lector, de asociación, que no elude el contraste con lo concreto y aparentemente univalente de
imágenes como hay ropas colgadas de un alambre… que posee el efecto de lo concreto sin más, del paisaje con apenas rastros de humanidad, que se deshumaniza –todo acaba en la enumeración de elementos vulgares que parcializan al sujeto: calzoncillos, toallas y camisas que lloran lentas lágrimas sucias.
El poema va a culminar con la expresión "lentas lágrimas sucias". La imagen genera un
contrasentido: las lágrimas cumplen la función de limpiar, de purificar, pero no en este caso en el que son sucias, asociadas a la fatalidad de lo contaminado por formar parte de este mundo.
A lo largo del poema podemos apreciar cómo el poeta nos muestra la realidad desfigurada,
nos ilustra otra realidad y, de este modo, la percibimos desde otras perspectivas. En este
sentido, podemos considerar a Neruda un poeta que educa nuestra mirada permitiéndonos
redescubrir las cosas que en él habitan no solo pensándolas sino, especialmente, sintiéndolas.
WALKING AROUND - TEXTO
Sucede que me canso de ser hombre.
Sucede que entro en las sastrerías y en los cines
marchito, impenetrable, como un cisne de fieltro
navegando en un agua de origen y ceniza.
El olor de las peluquerías me hace llorar a gritos.
Sólo quiero un descanso de piedras o de lana,
sólo quiero no ver establecimientos ni jardines,
ni mercaderías, ni anteojos, ni ascensores.
Sucede que me canso de mis pies y mis uñas
y mi pelo y mi sombra.
Sucede que me canso de ser hombre.
Sin embargo sería delicioso
asustar a un notario con un lirio cortado
o dar muerte a una monja con un golpe de oreja.
Sería bello
ir por las calles con un cuchillo verde
y dando gritos hasta morir de frío.
No quiero seguir siendo raíz en las tinieblas,
vacilante, extendido, tiritando de sueño,
hacia abajo, en las tripas moradas de la tierra,
absorbiendo y pensando, comiendo cada día.
No quiero para mí tantas desgracias.
No quiero continuar de raíz y de tumba,
de subterráneo solo, de bodega con muertos,
aterido, muriéndome de pena.
Por eso el día lunes arde como el petróleo
cuando me ve llegar con mi cara de cárcel,
y aúlla en su transcurso como una rueda herida,
y da pasos de sangre caliente hacia la noche.
Y me empuja a ciertos rincones, a ciertas casas húmedas,
a hospitales donde los huesos salen por la ventana,
a ciertas zapaterías con olor a vinagre,
a calles espantosas como grietas.
Hay pájaros de color de azufre y horribles intestinos
colgando de las puertas de las casas que odio,
hay dentaduras olvidadas en una cafetera,
hay espejos
que debieran haber llorado de vergüenza y espanto,
hay paraguas en todas partes, y venenos, y ombligos.
Yo paseo con calma, con ojos, con zapatos,
con furia, con olvido,
paso, cruzo oficinas y tiendas de ortopedia,
y patios donde hay ropas colgadas de un alambre:
calzoncillos, toallas y camisas que lloran
lentas lágrimas sucias.
PABLO NERUDA (1904 - 1973).
EL POETA Y LA POESÍA - NERUDA (Chile 1904-1973)
Neruda ha manifestado su opción por una poesía impura, “Me niego a masticar teoría” afirmó en 1957, expresando su elección por la naturalidad por encima del artificio orfebreril.
Es que Neruda es un poeta natural; pero esto no significa, sin embargo, que improvisase o desatendiese los aspectos técnicos. Hay en él un fuerte anti-intelectualismo: Neruda quiere ser un poeta conectado con la naturaleza, con la que de hecho vive en comunión simbiótica. Con la naturaleza y los objetos. Su semántica y sus intuiciones son, preferentemente emocionales.
En política, incluso, es socialista emocional y no intelectualmente o por haber leído a Marx. A su poética, por tanto, se la podría describir como la poética de la emoción o de la comunicación por la emoción.
Unas palabras suyas lo confirman: "Tengo hasta cierto desprecio por la cultura; como interpretación de las cosas me parece mejor un conocimiento sin antecedentes, una absorción física del mundo". (Neruda, Confieso que he vivido).
Además, Neruda entiende la poesía funcionalmente, como poesía servicial. Ideológicamente hay en él un populismo histórico que se proyecta de esa forma en su discurso poético. Su poesía pretende ser comunión con aquellos que están condenados a la marginalidad en un mundo que los excluye. Por ello no es extraño que su voz se eleve en múltiples ocasiones particularmente contra el Creacionismo de Huidobro. Para él "todo poeta debe actuar como un artesano", contribuyendo con su palabra y su actitud a la construcción de la sociedad, a la transformación de las condiciones que rodean al hombre. Esto significa que Neruda concibe la poesía como una herramienta de trabajo y como un instrumento de liberación que es, de acuerdo a algunos críticos, una de las características que vertebran la literatura
hispanoamericana de esas décadas. Neruda, por lo tanto, y en síntesis, enfrenta a la concepción de la literatura por la literatura y la repudia con energía, renegando de preciosismos y de normas, de escuelas y de teorías, de métodos y artilugios. Su única sujeción es el compromiso de solidaridad.
García Lorca lo intuyó así cuando, por aquellos mismos años, lo describía como "un poeta que vivía más cerca de la sangre que de la tinta". O, lo que es lo mismo: más cerca de la vida que de la cultura.
La poesía de Neruda se caracteriza, precisamente, por la identidad y la empatía del poeta y del hombre. A Neruda solo se lo puede leer dentro de su contexto socio-histórico. Para él la poesía no se limita a ser estética, sino conciencia e iluminación y acción transformadora.
Efectivamente, desafiando a los “ismos” vanguardistas, que parecían inundarlo todo con abstracciones, se afirmó sobre lo anecdótico y lo figurativo, sobre lo tangible y lo palpable. Él es el poeta de las realidades inmediatas y prosaicas del cotidiano vivir. Sus Odas elementales, que a veces parecen verdaderos listados de cosas, constituyen una inmersión en la impureza inevitable de la materia.
Neruda supo recuperar y redimir la belleza del mundo cotidiano: la belleza de las elementales, anodinas y espurias realidades de nuestro vivir, para la que nos hallábamos ciegos por exceso de rutina en nuestros ojos.
Neruda supo recuperar y redimir la belleza del mundo cotidiano: la belleza de las elementales, anodinas y espurias realidades de nuestro vivir, para la que nos hallábamos ciegos por exceso de rutina en nuestros ojos.
INTRODUCCIÓN A LA POESÍA DESPUÉS DE LAS VANGUARDIAS
La literatura hispanoamericana: poesía de S. XX (Pablo Neruda).
Antes de abordar el tema de la poesía hispanoamericana, convendría hacer algunas apreciaciones sobre esta literatura –sin diferencias genéricas- durante este siglo. Durante el siglo XX la literatura hispanoamericana ha alcanzado su mayor repercusión internacional.
Hasta el siglo XIX la literatura americana había tenido un carácter básicamente colonial, pero a partir de ese momento, tras la independencia de los distintos países, se fue gestando una literatura propiamente nacional o continental.
Pueden fijarse tres etapas en la literatura hispanoamericana, que afectan a todos los géneros: el Modernismo de final de siglo; la Vanguardia, comienzo de la modernidad; y la renovación narrativa y poética de los cuarenta.
Hasta el siglo XIX la literatura americana había tenido un carácter básicamente colonial, pero a partir de ese momento, tras la independencia de los distintos países, se fue gestando una literatura propiamente nacional o continental.
Pueden fijarse tres etapas en la literatura hispanoamericana, que afectan a todos los géneros: el Modernismo de final de siglo; la Vanguardia, comienzo de la modernidad; y la renovación narrativa y poética de los cuarenta.
Modernismo y Posmodernismo
En Hispanoamérica, el Modernismo surgió como rechazo a la mentalidad utilitaria del positivismo, propio del realismo, y como una cierta continuidad natural del Romanticismo tardío.
El Modernismo literario español tiene su origen en Hispanoamérica. Aquí el movimiento surge a partir de la publicación del Ismaelillo, de José Martí. Con esta obra se inicia una renovación estética que apunta en dos direcciones:
- Renuncia a la retórica del Romanticismo hispanoamericano con la búsqueda de una nueva expresión que se halla en la literatura europea contemporánea, especialmente en la francesa.
- Reacción al materialismo y la deshumanización que dominaba el mundo, consistía en la recuperación del trascendentalismo romántico europeo.
El florecimiento modernista hispanoamericano viene impulsado por el cubano José Martí y por el nicaragüense Rubén Darío, cuya obra supuso el referente para la lírica hispana de las dos orillas del Atlántico.
Pronto se experimenta un cierto cansancio de las exageradas retóricas modernistas y se tiende a una expresión más sencilla, esta nueva corriente poética es el Posmodernismo.
En él habría que incluir los primeros libros de Pablo Neruda.
El Vanguardismo
Algunos poetas posmodernistas comienzan a incluir, con el paso del tiempo, experimentos vanguardistas en sus textos, influidos por las vanguardias europeas. En los diferentes países americanos se crean revistas y grupos que difunden los ismos europeos y otros creados allí.
Entre los numerosos movimientos vanguardistas hispanoamericanos, los de mayor trascendencia son el Creacionismo chileno, con Vicente Huidobro, el Ultraísmo argentino con Jorge Luis Borges.
Poesía hispanoamericana después de las vanguardias
La lírica camina por vías distintas a partir de los años 20 y 30. La rehumanización de la poesía
encuentra una vía muy original en la llamada poesía negra o afroantillana.
En general la poesía negra muestra un mundo donde reinan la sensualidad y el vitalismo, a la vez que se denuncia la situación de marginación en que viven los negros y mulatos. Unos de los poetas más importantes es el cubano Nicolás Guillén (1902-89).
Otro camino de la rehumanización de la poesía es el del compromiso político.
Características:
- Utilización del verso libre.
- Significación de los espacios en blanco y signos de puntuación.
- Menor cantidad de palabras para aumentar la importancia de lo que se dice.
- Incorporación de elementos "anti-poéticos" como la peluquería, zapateria, cine, etc.
- Manifestación elitista.
- Evasión de la realidad o compromiso con causas populares.
- Nuevo enfoque del amor: el amor implica sensualidad, el erotismo ira siempre unido a la idea de amor.
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